03 agosto 2013

Buenos días

Me subo en el metro esta mañana y lo primero que oigo es un "buenos días"..el vigilante de seguridad que acaba de entrar también en esa estación saluda a los viajeros. Será que salgo de guardia, tengo la mente aún sumida en ensoñaciones de las últimas horas dormidas de forma intranquila por si me avisaban.. pero me centro en esas palabras, dejo que inunden mis pensamientos y se repitan, como un eco.

Buenos días... revela el optimismo que tenemos en lo más interno de cada uno. Ese deseo de que todo salga bien hoy, esas ganas de empezar con una sonrisa, como quien desenvuelve un regalo. Un deseo que es en el fondo una tímida certeza.. va a ir bien, aunque los pensamientos negativos quieran hacerse un hueco, aunque las preocupaciones luchen por ganar a nuestra ilusión.. sabemos que empieza un nuevo día, una nueva esperanza, una oportunidad de cambio.. sabemos que va a ir bien.

Así son las primeras palabras que le dedicamos a todo el mundo. No son un deseo, ni una fórmula de cortesía.. son una afirmación. Buenos días. Así van a ser.


28 junio 2013

Mejor riendo..

 
 
Si todo va a acabar aquí.. mejor que acabemos riendo.. me dijiste. Y una vez más me diste una valiosa lección de vida. Una vez más me hiciste sonreir.. y luego reir a carcajadas.

La rutina, nuestros límites autoimpuestos, los prejuicios.. son sombras oscuras, nos vuelven grises, apagan ese brillo que nos hace únicos. Nos enseñaron que la persona cabal es seria, que posee autocontrol. Sólo los niños ríen sin límites, sólo ellos se alegran por nada, su mirada es nueva, su corazón todo lo sabe.. y luego poco a poco lo van olvidando. Se nos va olvidando vivir.

Gritar, sentir, romper barreras.. aceptar cada día el reto de poner nuestro granito de arena para cambiar el mundo. A veces me vuelvo fría y gris, a veces me olvido de buscar estrellas.. de reconocerlas e incorporarlas a mi vida. Últimamente siento que cada vez me cuesta más el viaje hacia ellas.. me debo de estar haciendo mayor.

Por eso quiero hacerme una promesa. La promesa de abrir los ojos a la belleza de la vida. De no pasar de puntillas, rozando este maravilloso regalo.. sino zambullirme en él, de lleno, sabiendo que la magia está en esos pequeños detalles.. que las estrellas aparecen cuando menos las esperas.

Y así, riendo, despegamos. Mi estrella y yo. Las carcajadas borraron mi miedo; y puede.. que aquel haya sido, hasta el momento, mi mejor vuelo.

13 enero 2013

Empezar....



Empezar no es fácil. Implica una decisión que nace de un impulso.. y no siempre es sencillo seguir a nuestros impulsos. Hace mucho tiempo creé este blog. Un cuaderno de viaje. ¿Y cuál era mi viaje?... ambicioso. Un viaje a las estrellas.

Viajar a las estrellas implica tener los ojos muy abiertos, el alma muy receptiva y una incombustible alegría interior que te alimente en el camino. No es caro. No se necesita mucho equipaje, ni siquiera tiempo.

Mi viaje a las estrellas empieza cada mañana... buscando la belleza en cada detalle. Las estrellas van apreciendo en el camino, sin tan siquiera llamarlas. Se comunican con sonrisas, las descubres en las miradas.. las estrellas son todas y cada una de las almas que alegran tu día, que te muestran un secreto que no conocías, que iluminan los senderos oscuros y calientan tu alma.

Hoy.. me ha parecido un buen día para retomar una vieja costumbre. La de encontrar la felicidad en cada detalle y abrir el corazón a las estrellas. Hoy es un buen día para empezar de nuevo el viaje...