27 abril 2007

Se escapa otro tren



“El tiempo es muy lento para los que esperan, muy rápido para los que tienen miedo, muy largo para los que se lamentan, muy corto para los que festejan. Pero para los que aman, el tiempo es eternidad". (William Shakespeare)

Se acaba el tiempo. Te irás, me iré, y me pregunto si habré dejado huella en tus recuerdos.. si recordarás en algún momento, bajo el cielo de esa gran ciudad que te espera, que hubo un tiempo en que reíste conmigo.. que una vez comenzaste a contarme tus miedos. Casualidades de la vida nos cruzaron en el camino, y ahora nos separan. Siempre llego tarde.

Me resigno porque no es el primer tren que se me escapa.. y no será el último. Sé lo que se hace en estos casos, algo he aprendido, y ya no me quedo de pie en la estación por mucho tiempo.. sólo el necesario para volver a ilusionarme.

Te echaré de menos, y echaré de menos esos mil pequeños detalles que me hacían feliz por instantes. Se puede vivir pendiente de una sonrisa.. me enganché a ella sin quererlo, sin darme cuenta, empecé a necesitarla. Ahora me dejas sin ella. A veces tengo la impresión de que las personas pasan por mi vida, se quedan lo suficiente como para que les coja cariño, y luego se marchan. Y yo, amoldándome a las circunstancias, he tenido que acostumbrarme a olvidar.

Pero esto no es una despedida porque sé que la vida da muchas vueltas y sé que esta vez es un poquito diferente.. esta vez volverás. Y sólo pido que cuando eso ocurra todo siga igual. Quiero reconocer entonces en tu mirada al niño que un día tocó mi alma para siempre.

Por cierto.. hoy ya no tengo dudas.. ¿demasiado tarde?...

10 comentarios:

Beth dijo...

Espero que no sea demasiado tarde...

Anónimo dijo...

No será demasiado tarde, sobre todo si sabes ver en él al niño que una vez fue. Eso se aprecia.
Un beso.

Óscar Sejas dijo...

Nunca es tarde para amar. Nunca es tarde para abrigarse con otro corazón. Nunca es tarde para sentir. Tú sientes y lo demuestras, él se dará cuenta de eso.

Un abrazo enorme.

Recursos para tu blog - Ferip - dijo...

No, si é quiere, no es tarde.
Pero es de a dos...Y no te reproches las dudas...por algo están.
Tu corazón ve más allá de tu razón.
Escúchalo, no miente.
Levanta esa cabecita y sal de esas maderas...y camina, dulce estrella, camina, aunque el paso sea pesado en sus comienzo, las alas harán el resto.
Besos y fuerza!
Que el camino sigue al frente.
Lo de atrás no te pertenece.
Gira y avanza.
Mírate, que hermosa eres!
:)

Te dejo algo...

Manones pío pío!!!!!

JUANAN URKIJO dijo...

Nunca es tarde. Siempre algo permanece. Si en un momento de la vida alguien estacionó en tu corazón, muy posiblemente su huella permanezca para siempre. De modo que, como decía Machado, en Cantares: "Todo pasa y todo queda, pero lo nuestro es pasar; pasar haciendo caminos, caminos sonbre la mar".

Un beso, Mehreen. Te esperamos.

Juan Manuel dijo...

Hola, tus palabras exactas son lo que siente mi corazon vacio.
Tuve un amor corto, solo unos meses, pero que me bastaron para creer y darme cuenta que el Cielo existe. Fui feliz un tiempo en esta Tierra...

Ella vive aun, pero es como si no existiera más nada que nos una.
Aun no entiendo qué pasó... jamás peleamos.
Me encantó tu escrito, te repito, refleja exactamente lo que siento...

sopi/magyca dijo...

uff podria escribir cada letra, y la frase final me ha matado... me has encogido el corazon, me has recordado tanto...siguo con tus post para ver que encuetro. un besote

Itami dijo...

Pero sin darte cuenta las cosas que llegaron a hacerte sonreir se te escapan... y cuanto odio esa sensación...

Anónimo dijo...

simplemente me ha encantado, no te preocupes la vida da muchas vueltas y seguro que vuestros caminos se volverán a cruzar

Anónimo dijo...

CUANDO no puedo mirar tu cara miro tus pies.

TUS PIES de hueso arqueado, tus pequeños pies duros.

YO SÉ que te sostienen, y que tu DULCE PESO SOBRE ELLOS SE LEVANTA.

TU CINTURA Y TUS PECHOS, la duplicada púrpura DE TUS PEZONES,

la caja de tus ojos que RECIÉN HAN VOLADO,

TU ANCHA BOCA DE FRUTA,

tu cabellera roja, pequeña torre mía.

Pero no amo tus pies sino porque anduvieron sobre la tierra y sobre el viento y sobre el agua,

hasta que me encontraron.