04 septiembre 2006

Síndrome ¿post?- vacacional.

Mucho ánimo si eres de los que se incorporan hoy a la rutina. Esta mañana los periódicos gratuitos estaban llenos de artículos sobre el síndrome post-vacacional, de trucos para sobrellevar el peso de la responsabilidad, los horarios, las prisas, los empujones en el metro y el autobús, los madrugones... Antes, la gente se levantaba a las cinco de la mañana para ir a trabajar al campo, las vacaciones no existían y por tanto tampoco el síndrome. Es lo que trae consigo la vida moderna.. no sé si vivimos mejor que "antes" (quiero pensar que sí), pero nos hemos inventado nuevos problemas.

A mí me quedan aún unos días para volver a levantarme a las siete (sí, la verdad es que eso es lo que peor llevo con diferencia, el tener que madrugar). Acabar las vacaciones es como abandonar el calorcito de tu casa y salir a la calle en plena tormenta. Vuelves de pronto a la realidad, y se desmorona de una forma bastante rápida el cascarón del huevo en el que te has metido durate el verano. Ya no hay tiempo para escribir tranquilamente en el blog, los paseos tienen horarios limitados, ese ratito que dedicabas a leer desaparece porque estás cansado para eso después de un agotador día dándole al coco.

Pero a decir verdad, no sé si a mí y a las personas como yo nos viene tan mal volver a la vida "normal". El verano nos regala muchas horas para pensar, reflexionar, jugar a filosofar.. quizás demasiadas. Quizás no es tan terrible que el trabajo (o el estudio, en mi caso) nos quite horas de comernos la cabeza con cosas que no van a ninguna parte, que no sirven más que para agobiarnos. Vamos, que estoy llegando a la conclusión de que el ocio excesivo me está afectando. Incluso he llegado a pensar que un día de estos voy a explotar.. que esta sensación de intraquilidad (que a menudo me invade y, lo peor de todo, sin tener muy claro por qué) va a hacerme volar en mil pedacitos. Luego me doy cuenta de que no, de que lo que me hace falta es una dosis de preocupación de otro tipo.. un poco de trabajo y dejar de vaguear. Así que tranquil@, esto en poco más de un par de semanas se me pasa. Con suerte, es posible que la rutina me salve. Creo que lo mío es más bien un "síndrome vacacional".

2 comentarios:

Óscar Sejas dijo...

Yo soy de los que hoy volvieron a trabajar...y ya estoy deprimido jajaja. Con lo bien que andaba yo de vacaciones sin hacer nada, divagado y pensando que todo podría ser mejor...

Un saludo

Mehreen dijo...

Vaya... :-) Mucho ánimo Oski, venga, que las vacaciones llegan antes de lo que pensamos!! jeje; y además, cada día tiene su puntito especial aunque nos parezca que todo es una rutina. Yo estoy de maravilla de vacaciones, pero ya te digo.. creo que tanto ocio me está afectando ;-)

Un saludo y muchas gracias por tu comentario.